Una de las condiciones para que el marketing de contenidos funcione correctamente es que debe entretener al cliente. Por ejemplo, una publicación que busca desinstalar las ideas que perjudican nuestra venta debe ser presentada de manera tal que sea fácil y atractiva leerla. Recordemos que nuestro cliente ideal no tiene interés ni tiempo para leer nada de lo que le enviemos.
Alguien se preguntará cómo hacer entretenido un tema técnico y complejo. El talento y la creatividad de los redactores se ponen a prueba con este desafío.
En este ejemplo, vemos cómo hicimos atractivo un concepto que un distribuidor de cañerías de acero quería transmitir a sus clientes: que en China pueden comprar materiales de alta, media y baja calidad.
Si el cliente percibe que tendrá que hacer un esfuerzo mental adicional para comprender lo que queremos decirle, entonces tenemos un problema que nos pondrá en desventaja frente a la avalancha de distractores entretenidos que seducen a nuestro cliente cada día. O simplemente estaremos en desventaja frente a otros competidores que presenten o empaqueten la información de forma más atractiva.
En el marketing de contenidos primero debemos entretener, luego educar. Algunas implicancias de esto son: un título muy atractivo, redacción liviana y fácil de digerir, tema de altísima relevancia y utilidad para el cliente, extensión del artículo (o del video o del audio) conveniente al tiempo del cliente. En este escenario, la habilidad de explicar en fácil y entretenido algo cuya naturaleza es aburrida y compleja se convierte en una ventaja competitiva y de tremendo valor.
La carrera por ocupar las mejores posiciones en el marketing de contenidos está desatada. El ejemplo de LinkedIn es muy bueno. Esta red social, orientada a la búsqueda de oportunidades laborales y de negocios, compró una empresa llamada SlideShare.
Esta empresa despliega las presentaciones en PowerPoint que hacen los usuarios en un formato fácil de compartir en el mundo digital. Esta innovación trajo consigo una forma de usar los PowerPoint para ser subidos a SlideShare posteriormente. A diferencia de los PowerPoint convencionales, estos tienen mucho texto, al punto de ser autoexplicativos.
LinkedIn compró esta empresa para tomar posición de ventaja en la generación de contenido altamente relevante para sus usuarios. Sin embargo, faltaba competir con los millones de blogs independientes y corporativos que en el mundo generan contenido de valor para sus comunidades de usuarios y lectores.
En los blogs podemos escribir con total facilidad lo que queremos para los clientes-usuarios. Google reconoce esta información y la indexa en sus algoritmos de búsqueda. Por eso, LinkedIn habilitó una herramienta que se llama LinkedIn Pulse. Esta herramienta es el blog personal de cualquier miembro de LinkedIn. Así, esta compañía incentiva a los ejecutivos a que desplieguen aquí la información relevante para su comunidad: dentro de sus puertas y no fuera. Los resultados de LinkedIn Pulse son sorprendentes.
Otro tipo de contenidos que LinkedIn abordó con inteligencia son los cursos, el e-learning. Los cursos en línea son de los contenidos más populares y con mayor tendencia al alza. Las personas, para aprender, compran cada vez más cursos en línea. Así pueden estudiar desde sus casas o en el momento y forma que les parezca más convenientes.
Por entrar en esta área, LinkedIn habilitó una plataforma de e-learning y compró la empresa Lynda. com en USD 1,5 billones. Esta carrera por crear contenido de valor tiene como objetivo natural formar audiencias que fielmente consuman la información que generamos.
En la creación de esas audiencias está la ventaja que todos buscan. Es la nueva economía. Los medios convencionales como la televisión, la radio y otros pierden terreno frente a las comunidades, que leal y regularmente consumen la información de los blogs, de LinkedIn y de otras plataformas que tengan contenido de valor.
DEJA UN COMENTARIO